La Virgen del Mar, donde fue faro. Fotografía de la web de la Hermandad.
¡Virgen del Mar, matutina,
faro de los albos puertos,
cristal de roca marina,
dalia de los mares muertos!
¡Mira el peregrino
que asciende a tí de la mar
sin voz, sin luz, sin polar
sobre un lebrel submarino!
La Virgen del Mar quisiera
que el barco de la alegría
tuviera sólo por guía
sin tu lebrel, tu bandera.
No, mi marinero
no llores tú porque no
quisiera la Virgen que yo
ruegue por tu compañero.
Rafael Alberti
faro de los albos puertos,
cristal de roca marina,
dalia de los mares muertos!
¡Mira el peregrino
que asciende a tí de la mar
sin voz, sin luz, sin polar
sobre un lebrel submarino!
La Virgen del Mar quisiera
que el barco de la alegría
tuviera sólo por guía
sin tu lebrel, tu bandera.
No, mi marinero
no llores tú porque no
quisiera la Virgen que yo
ruegue por tu compañero.
Rafael Alberti